Durante la primera mitad de julio de 2024, la inflación en México mostró un notable incremento. El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se situó en un 5.61% a tasa anualizada, acelerándose desde el 5.17% registrado en la quincena anterior y superando las expectativas del consenso de analistas, que preveían un 5.27%. Este aumento ha llevado los precios al consumidor a su nivel más alto en más de un año.
En términos quincenales, la inflación general aumentó un 0.71%, frente al 0.53% observado en la quincena previa, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Este resultado superó el 0.48% previsto por los analistas.
El índice de precios subyacente, que refleja la tendencia inflacionaria a mediano y largo plazo, mostró un incremento quincenal del 0.18%, superior al 0.13% de la quincena anterior y ligeramente por encima de las expectativas. A tasa anual, la inflación subyacente se ubicó en 4.02%, una leve disminución respecto al 4.08% registrado en los quince días anteriores, y marginalmente por debajo del 4.03% esperado por los analistas.
Dentro del índice subyacente, los precios de las mercancías aumentaron un 0.02% quincenalmente, mientras que los precios de los servicios avanzaron un 0.37%.
El índice de precios no subyacente registró un incremento quincenal del 2.32%, alcanzando un 10.64% a tasa anual. Dentro de este índice, los precios de los productos agropecuarios subieron un 3.49% quincenalmente, y los precios de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno aumentaron un 1.21%.
Estos datos serán cuidadosamente analizados por el Banco de México (Banxico) en preparación para su próxima reunión de política monetaria, programada para el 8 de agosto.